Donde habita el corazón del cielo

Este proyecto me dio el conocimiento sobre la muerte necesario para afrontar ese año la enfermedad y muerte de mi madre. Dio poemas sobre el mito de la vagina dentada, imágenes de mujeres embarazadas flotando en cenotes en el silencio de la creación interior, zompantle de calaveras celebrando las muertes y cerámicas…
y todos estos objetos fueron expresiones del soplo del corazón del cielo que nos dice en susurros de aliento: La vida depende de una buena relación con el espíritu del lugar y con saber morar y crear.
El discurso de la muerte-vida dio paso a la risa creadora. Observar las primeras semillas naturales fue sembrar las semillas de pensamiento creativo que inspiraba el nuevo camino por recorrer, el nuevo proyecto: